miércoles, 25 de marzo de 2009

CELEBRACIÓN MUNDIAL DEL DÍA DE LA MUJER


El pasado 8 de marzo se celebró el Día Mundial de la Mujer. No podíamos dejar pasar este acontecimiento, sin hacer unas breves reflexiones al respecto. Para comenzar, vayamos al inicio de esta celebración. ¿Cuándo y dónde se inicia esta celebración? La celebración del 8 de marzo como Día Mundial de la Mujer es una iniciativa de Clara Zetkin, líder del Sindicato Internacional de Obreras de la Confección, quien lo propuso durante el I Congreso Internacional de Mujeres Socialistas, realizado en Copenhague, Dinamarca, en 1910. La Organización de las Naciones Unidas lo adoptó en 1985 durante la Tercera Conferencia Internacional para la Mujer en Nairobi, Kenya. Y ¿Cuál sería la razón para conmemorar este día? Con esta fecha se busca motivar la reflexión e impulsar medidas para mejorar las capacidades y opciones de las mujeres de todo el mundo, para que ejerzan sus derechos y libertades y tengan la capacidad de realizar sus proyectos en condiciones de equidad y respeto. Así lo informó la CONAPO. A todo esto habría que agregar la lucha que las mujeres del siglo XX sostuvieron para, precisamente ejercer, en la práctica, no en el papel, todos esos derechos a los que se refieren todas y cada una de las Convenciones llevadas a cabo en pro de la igualdad de las mujeres. No podemos olvidarnos de todas aquellas mujeres que han luchado hombro a hombro, desde diferentes trincheras, por la justicia y la equidad. Para muestra, un botón: las llamadas Adelitas que participaron en la lucha revolucionaria de nuestro país. Y qué decir de las miles de mujeres que han tenido que emigrar a las grandes ciudades y que han sido víctimas de la discriminación y la explotación, sólo porque son diferentes y en algunos casos ni siquiera hablan el idioma oficial de este país. Y no olvidemos a las miles de madres solteras que en los últimos años han visto crecer su número, no por la falta de oportunidad o por la falta de información, sino más bien porque se ha incrementado el número de hombres irresponsables y manipuladores. Hablemos de las víctimas de la violencia intrafamiliar. De las desaparecidas de Juárez, el caso más vergonzoso y ominoso de nuestra historia reciente. De las miles de madres que tienen que luchar para darle a sus hijos algo que comer, debido a la ausencia paterna, ya sea en el exilio voluntario o en el involuntario. Debemos hacer un reconocimiento a todas aquellas mujeres que nos han legado historia, cultura, valores; principios. Cada uno de nosotros compartimos ese origen. Somos hijos de una mujer y si somos más afortunados, de una mexicana. Debemos sentirnos orgullosos de que esta nación se ha construido con base a la lucha de tantas y tantas heroínas anónimas. De tantas mujeres que han dejado su vida en los talleres de costura, en el campo, en los hogares. Hoy hay que celebrar que existe igualdad y equidad, pero aún estamos muy lejos como para celebrar que efectivamente, en México no existe la discriminación y el abuso hacia el llamado “sexo débil”. Hoy, por lo pronto, quiero agradecer a una gran mujer que con su ejemplo, que con fuerza y su amor, me enseñó a luchar y a soñar; me enseñó a compartir, a amar y a respetar. Que cada día que pasa, es una gran oportunidad para agradecer al creador lo que tengo. Que cada día, la vida nos da una oportunidad para seguir luchando y para no ceder ante las adversidades. Gracias madre por tus enseñanzas y porque siempre has estado ahí y porque seguramente, siempre estarás con nosotros.